CAFÉ DE MAÑANA
Por José Luis Enríquez Ambell
La solidaridad de la población en México en los momentos de tragedias es una conducta ejemplar.
Es de reconocerse la espontánea organización ciudadana que en distintos momentos de las tragedias naturales y afectaciones o desastres que se han enfrentado en el país – como ahora por la explosión de una pipa con gas en la zona metropolitana de la Cdmx – y momentos que han demostrado la calidad y calidez de la población a través de labores de rescate, donaciones de alimentos y creación de redes de apoyo, entre otras acciones.
En medio del asombro y dolor humano al ver imágenes fuertes mediante las redes sociales y los medios de comunicación, la capacidad de Unión y apoyo entre todos los sectores de la comunidad civil e institucional, nos muestra y demuestra las diversas manifestaciones de la gran solidaridad en nuestro México.
Y es que, el apoyo ciudadano mueve a todos los corazones y a las masas en favor de los afectados en el lugar de los hechos y hasta en el entorno de los hospitales donde trasladaron a quienes resultaron dañados en su persona, y también en sus afectos y economía.
Ya en ocasiones con motivo de desastres naturales donde se han afectado las redes de comunicación y el transporte – por sismos e inundaciones, como ejemplo – los ciudadanos han sabido crear sus propias redes y vías de comunicación incluso, convirtiendo a unidades y vehículos particulares en unas camillas para transportar heridos, y eso nos muestra las bondades naturales que existen en el ADN de todos los mexicanos y mexicanas por encima de otros vaivenes de la época.
Ahora con la explosión, queda demostrado que las donaciones y colectas con suministros esenciales para los afectados y sus familiares, muestra lo humana, generosa y voluntaria que es toda la población mexicana, caracterizada por una profunda capacidad de organización social.
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Estás acciones sociales son todo un ejemplo contundente del concepto de participación ciudadana entre la sociedad civil en conjunto que caracteriza a México, muy por encima de las diferencias de enfoque político, y es que
nuevamente, miles de personas han venido mostrando su solidaridad, situación que se convierte en un bálsamo para los afectados, pero también en un símbolo de resiliencia.
Estos desafíos igual muestran la solidaridad de las mujeres y los hombres de todas las edades en materia de ayuda humanitaria.
DE SOBREMESA
La solidaridad social no debe impedir que las autoridades tienen la responsabilidad de investigar las causas y además, sancionar a responsables y ofrecer apoyo a las víctimas tras una tragedia como la explosión de una pipa de gas, pues el sector gobierno debe asegurar el cumplimiento de las normativas de seguridad y mitigar los riesgos futuros para evitar incidentes similares.
UN CAFÉ LECHERO LIGHT
En avenidas, boulevares, vías de comunicación y toda arteria urbana y rural donde circulan unidades similares – las pipas con gas – por el territorio veracruzano deben invitar a qué con plena responsabilidad las autoridades de la federación, estado y municipios activen el cumplimiento de las regulaciones de tránsito y seguridad para el transporte de sustancias peligrosas como el gas LP, con el fin de prevenir futuros accidentes.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
En el caso de la explosión en Iztapalapa, debe servir para revisar acciones institucionales que ayuden a prevenir posibles desastres.
¡ES CUANTO!
