Enaela García CEO de CYCSAS
Facilitar el teletrabajo o Home Office de manera segura, requiere un enfoque estratégico que proteja los activos digitales de las empresas sin comprometer la operatividad. El principal reto en un entorno de trabajo en casa es la falta de un perímetro definido, lo que exige un diseño de arquitectura de seguridad robusto.
La recomendación principal es implementar una filosofía de zero-trust, donde se asume que ning31una solicitud de acceso es segura por defecto. Esto implica aplicar el principio de mínimo privilegio, otorgando a cada usuario solo los permisos esenciales para realizar su trabajo y compartimentar la información, limitando el acceso a lo estrictamente necesario.
Además de una arquitectura segura, es fundamental educar a los trabajadores sobre buenas prácticas de ciberseguridad. Entre estas, destacan la gestión de contraseñas robustas, el uso de autenticación multifactor y la conexión a redes seguras, evitando el uso de redes públicas o no protegidas. También se deben fomentar actualizaciones regulares de software y sistemas, y concienciar sobre los riesgos de los correos maliciosos.
Con estas medidas, las empresas pueden mitigar los riesgos de ciberseguridad asociados al teletrabajo sin renunciar a esta modalidad laboral flexible y beneficiosa.
