Por: Luis Ramírez Baqueiro
“El deber de una persona está allí donde es más útil.” – José Martí.
Era inimaginable para los amantes de la 4T, que un resultado electoral en el vecino país del norte, fuera el principio de lo que parece el fin de su intento transformador nacional.
La aparente derrota electoral del republicano Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos, dejará descobijado al presidente mexicano López Obrador y a su proyecto de renovación nacional, pues ahora sin su posible respaldo, los vaivenes convulsos de la economía dejan vulnerable a la administración federal.
Y es que, si la crisis sanitaria global por el Coronavirus aprieta más, como es de esperarse, si las medidas draconianas fiscalmente aplicadas por el gobierno federal siguen asfixiando a los contribuyentes cautivos, si se sigue escapando el capital para el desarrollo nacional ante la falta de respaldo gubernamental, todo eso habrá de provocar una crisis impensable de pronóstico reservado.
Los mexicanos cansados de esperar respaldo de su gobierno, desempleados, sin protección sanitaria oportuna, sin seguridad, habrán de evidentemente cobrar la factura en donde más le duele al gobierno lopezobradorista, en las urnas.
El fin del esperanzador proyecto transformador que tanto cacareo el mesías tropical comienza a mostrar fecha de caducidad y el tufo pestilente del fracaso se asoma a la puerta, con noticias lacradas en el mismo corazón de la 4T, al que la Auditoria Superior de la Federación (ASF) ya no les creé tan honestos, como afirmaban serlo.
El quebranto patrimonial, el manejo discrecional del recurso para sus beneficios y la serie de señalamientos de corrupción entrampados en una repetición constante de excusas los pone en el cadalso de los condenados.
Sus días afirman están contados ¿será?
Sextante
Quien nuevamente se anota un punto más a su favor es el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso Local, Juan Javier Gómez Cazarín, quien confirma que tarde o temprano se aprende en estos menesteres de hacer política.
A pesar de las descalificaciones y grillas intestinas emanadas de la misma fracción parlamentaria de su partido, que le dispara fuego amigo, el político de Hueyapan de Ocampo sigue como las hormiguitas… chambeando.
Y es que la pulcritud con la que se operó la renovación de la Mesa Directiva logrando aprobarla por mayoría absoluta de 47 votos a favor, cero votos en contra y cero abstenciones, habla del tejido fino del personaje en comento.
Ahora le tocará hacer su chamba a la recién nombrada Adriana Paola Linares Capitanachi, quien por su comportamiento y desempeño legislativo habrá de conducirse seguramente por buen puerto.
Ya en tono de broma en los corrillos del Palacio Legislativo afirman que con tremenda operación Donald Trump hubiera sacado la elección en los Estados Unidos, así que ya hasta candidateaban a Gómez Cazarín como el operador político estrella del presidente Trump.
Lástima que el güero mamón no volteo a Veracruz, que, en una de esas, se lo lleva y le saca la elección.
Al tiempo.
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